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Foto de una ensalada mientras se está echando aceite de oliva

Dieta Mediterránea para combatir la obesidad

La celebración del Día Mundial de la Obesidad tiene que invitar a evaluar nuestros hábitos de vida, si queremos reducir al máximo los riesgos para nuestra salud. Fundamentalmente, la Interprofesional del Aceite de Oliva Español señala que se trata de saber si tenemos una vida activa, con la práctica habitual de ejercicio físico y, por supuesto, si tenemos una dieta sana y equilibrada. En este sentido, la Interprofesional recuerda que la Dieta Mediterránea es un modelo a seguir, ya que se asienta sobre un alto consumo de verduras, frutas, legumbres, pescados, un moderado aporte de carnes y con los aceites de oliva como principal fuente de grasa.

Aunque muchos puedan pensar lo contrario, una dieta rica en grasas saludables, como las que atesora el aceite de oliva virgen extra, ayuda a controlar nuestro peso. Así lo demostró el Estudio PREDIMED. Su coordinador, el doctor Ramón Estruch, explica que “cuando se diseñó PREDIMED, vimos que el 90 % de los participantes tenía sobrepeso y obesidad. Nos preocupó, porque con una dieta mediterránea suplementada con aceite de oliva virgen extra y con frutos secos, dábamos muchas más calorías que al grupo de control que no tomaba aceite ni frutos secos. Nos preocupó qué pasaría con el peso y el perímetro abdominal, dos factores de riesgo vascular. Lo que hemos comprobado en un seguimiento muy largo, de cinco años de media, es que incluso la gente perdía  peso  en  los  grupos  en  los  que  tomaban  aceites  de  oliva,  principalmente,  y mantenían el perímetro abdominal, que es un éxito desde el punto de vista de salud pública”.

Los resultados son inapelables: los 2.543 sujetos que siguieron una Dieta Mediterránea suplementada con aceite de oliva virgen extra sin restricciones pesaban al final del ensayo (5 años más tarde) 0,88 kilos menos de media que al inició del estudio. Su perímetro abdominal se incrementó en 0,85 centímetros, algo lógico cuando vemos que los participantes tenían entre 55 y 80 años, edad en la que existe una notable tendencia a engordar. En comparación, los que siguieron la misma dieta suplementada con frutos secos vieron cómo su peso medio se redujo en 0,40 kilos. Los 2.450 sujetos que siguieron una dieta baja en grasas experimentaron una disminución de peso menor, de 0,60 kilos, con un aumento del perímetro abdominal de 1,20 centímetros.

Ante la contundencia de los datos, el doctor Estruch no tiene la menor duda: “Las personas obesas o con sobrepeso no tienen que tener miedo de seguir una Dieta Mediterránea, en la que lógicamente están incluidos el aceite de oliva virgen extra y los frutos secos”. No solo controlan mejor su peso que aquellas personas que toman una dieta baja en grasa, sino que además experimentan una drástica disminución en el riesgo de padecer un accidente cardiovascular o diabetes”. 

Y lo mejor, añade el doctor Estruch, es que es una dieta que cuenta con el aval de la ciencia y que ha demostrado sus bondades más allá de cualquier duda: “Existen muchas dietas, con resultados que pueden ser beneficiosos a corto plazo. Lo que sí hemos demostrado es que, a largo plazo, la mejor dieta para conseguir un beneficio cardiovascular, sin perjuicio para al peso y perímetro abdominal es la Dieta Mediterránea. Y esto está cada vez más aceptado por la comunidad internacional”.

 


 

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