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Foto de una cocinera con personalidades de instituciones

La Comunidad de Madrid atiende un millón de servicios de comida al año en sus comedores sociales
La Comunidad de Madrid, a través de sus cuatro comedores sociales de gestión directa, reparte al año más de 1,1 millones de servicios de comida y ofrece más de 1.000 plazas para atender a aquellas personas que atraviesan especiales dificultades. Así, estos comedores prestan un servicio básico de alimentación y, a la vez, son lugares de encuentro y socialización que refuerzan los procesos de inclusión de sus usuarios.

El presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha visitado el comedor social de la calle Canarias de la capital. Allí, además de conocer el funcionamiento del centro, ha podido charlar con las personas que en ese momento se encontraban almorzando para acercarse a sus realidades. Este comedor tiene una capacidad máxima de 612 plazas y da comidas diariamente a una media de 180 personas. 

El Comedor de la Calle Canarias forma parte de la red de comedores sociales de la Comunidad de Madrid, formada por cuatro comedores propios gestionados por la Agencia Madrileña de Acción Social (junto a éste los comedores de San José, de Santa Isabel y el de la Plaza Elíptica), así como por los comedores gestionados por entidades sociales con las que el Gobierno regional trabaja coordinadamente.

La atención a las necesidades básicas de las personas y la garantía de acceso a bienes y servicios que puedan contribuir a reforzar procesos de inclusión es una de las tres patas en las que la Comunidad de Madrid centra su Estrategia de Inclusión Social (2016-2020). Esta estrategia cuenta con un presupuesto de 2.891 millones y tiene como principales objetivos eliminar la pobreza severa de nuestra región y fortalecer las políticas que garanticen la igualdad de oportunidades para todas las personas. 

Para ello, se apoya en tres ejes fundamentales: la garantía de unos ingresos mínimos adecuados para llevar una vida digna; el apoyo para la promoción de oportunidades de empleo para las personas que tienen mayores dificultades; y el acceso a servicios esenciales como la educación o la sanidad que ayudan a prevenir la transmisión intergeneracional de la pobreza.

Renta mínima de inserción
Junto a la atención a las necesidades básicas de las personas, la Renta Mínima de Inserción es uno de los instrumentos de inclusión social más importante con el que cuenta la Comunidad de Madrid. Se trata de una ayuda económica que permite cubrir las necesidades básicas de la vida diaria, y que en nuestra región, a diferencia de otras comunidades autónomas, no tiene una duración limitada en el tiempo, sino que se mantiene la ayuda mientras persista la situación de necesidad. La Comunidad de Madrid ha destinado el año 2018 a la Renta Mínima de Inserción casi 169 millones de euros un 39 % más que el año 2015, con lo que se ha atendido, hasta diciembre, a 33.000 personas.

Para el Gobierno regional, una de las mejores noticias de este 2018 es la disminución de solicitudes de Renta Mínima de Inserción en el primer semestre de 2018 en un 22,51 % respecto a 2017. Además, 4.084 perceptores de Renta Mínima se han incorporado al mercado laboral, entre los meses de enero a septiembre, lo que supone un incremento del 55,5 % respecto al mismo periodo de 2017.  
 

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