Los Estados Miembros de las Naciones Unidas han aprobado, en el marco del Consejo de Derechos Humanos en Ginebra, una resolución histórica que establece la creación de un grupo de trabajo intergubernamental. Este órgano tendrá como mandato la redacción de un instrumento internacional jurídicamente vinculante: la Convención Internacional sobre los Derechos Humanos de las Personas Mayores.
Este avance representa la culminación de años de trabajo, activismo y compromiso por parte de organizaciones de la sociedad civil, defensores de derechos humanos y entidades que conforman la Mesa Estatal a favor de las personas mayores. La evidencia recopilada durante este proceso ha puesto de manifiesto que una convención específica es la respuesta más adecuada para abordar las carencias y la fragmentación que existen en el sistema internacional de derechos humanos, en relación con las personas mayores.
La futura convención tendrá un impacto significativo y duradero en la vida de las personas mayores de todo el mundo, y aportará beneficios sociales amplios en el contexto del envejecimiento poblacional. Así lo creen las principales entidades de mayores que forman parte de la Mesa Estatal.
Este instrumento proporcionará mayor claridad normativa y una guía concreta para que los Estados puedan promover y proteger de forma efectiva los derechos de las personas mayores. Asimismo, contribuirá a erradicar el edadismo y la discriminación por razón de edad, garantizando el acceso a la justicia y a mecanismos de reparación ante posibles vulneraciones de derechos.
Siguientes pasos a dar
Tras la clausura del Grupo de Composición Abierta sobre el Envejecimiento en 2023, surgieron interrogantes sobre los pasos siguientes en el camino hacia la celebración de esta convención. En este contexto, destaca la activa participación del Gobierno de España, que ha reafirmado su compromiso con el proceso a través del mandato recogido en el II Plan Nacional de Derechos Humanos. España ha resaltado, además, el papel fundamental de la sociedad civil, que ha acompañado, promovido y supervisado el desarrollo de las negociaciones durante años. Igualmente, ha subrayado la importancia de que la resolución haya sido adoptada por consenso, lo que representa un hito clave para su legitimidad y viabilidad futura.
Los próximos pasos dentro del sistema de Naciones Unidas incluirán la definición de los recursos necesarios y la estructura organizativa del nuevo grupo de trabajo intergubernamental. Será esencial garantizar la participación activa y significativa de todos los actores involucrados, incluyendo los gobiernos, la sociedad civil y, especialmente, las propias personas mayores, quienes deben ocupar un lugar central en el diseño y la implementación de la convención.
La Mesa Estatal a favor de las personas mayores
Creada en Madrid en octubre de 2013, la Mesa Estatal a favor de las personas mayores tiene como misión la defensa de los derechos de este colectivo frente a situaciones de abuso, violencia y discriminación por edad. Busca también visibilizar a las personas mayores dentro del sistema de protección de derechos humanos y reconocer sus valiosas contribuciones a sus familias y a la sociedad en general. En coherencia con estos objetivos, la Mesa respalda firmemente la elaboración, adopción, ratificación e implementación de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos Humanos de las Personas Mayores.