La Organización Mundial de la Salud (OMS) celebra hoy el Día Mundial de la Salud bajo el lema “La salud para todos”, con el objetivo de lograr cobertura sanitaria universal para todas las personas. De esta manera, la OMS pide a los líderes mundiales que respeten los compromisos que contrajeron cuando acordaron los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en 2015 y que adopten medidas concretas para promover la salud de todas las personas.
Esto significa garantizar que todas las personas, en cualquier lugar, puedan tener acceso a servicios de salud esenciales y de calidad sin tener que pasar apuros económicos. Todo ello, no sólo mejora la salud de las personas y su esperanza de vida, sino que también protege a los países de las epidemias, reduce la pobreza y el riesgo de padecer hambre, crea empleos, impulsa el crecimiento económico y promueve la igualdad de género.
Algunos países ya han logrado importantes avances hacia la cobertura sanitaria universal. Aun así, la mitad de la población mundial todavía no puede acceder a los servicios de salud que precisa. Si los países quieren alcanzar la meta de los ODS, mil millones más de personas deberán beneficiarse de la cobertura sanitaria universal (CSU) de aquí a 2023.
De esta manera, el Día Mundial de la Salud destaca la necesidad de la CSU y los beneficios que puede aportar. La OMS y sus asociados intercambiarán ejemplos de medidas que pueden adoptar para lograrla mediante una serie de actos y conversaciones que se celebrarán en distintos niveles.
A lo largo de 2018, la OMS quiere inspirar, motivar y guiar a las partes interesadas en la CSU para que contraigan compromisos en esta esfera:
• Inspirar, poniendo de relieve el poder que tienen los responsables de la formulación de políticas para transformar la salud de su nación, caracterizándolo como un desafío estimulante y ambicioso, e invitándoles a formar parte del cambio.
• Motivar, intercambiando ejemplos de cómo los países ya están avanzando hacia la CSU y alentando a otros países a encontrar su propio camino.
• Guiar, proporcionando herramientas para un diálogo estructurado en materia de políticas sobre la manera de promover la CSU en el ámbito nacional o respaldando estos esfuerzos en otros países. Por ejemplo, ampliando la cobertura de los servicios, mejorando su calidad y reduciendo los pagos sufragados por los usuarios de su propio bosillo.